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Feller Rate ratifica en “BBB-” la calificación de la solvencia de Banco Atlántico de Ahorro y Crédito. Perspectivas “Estables”.

2 AUGUST 2024 -  SANTO DOMINGO, REP. DOMINICANA

Feller Rate ratificó en “BBB-” la calificación de solvencia de Banco Atlántico de Ahorro y Crédito, S.A. (Atlántico). Las perspectivas de la calificación son “Estables”.

La calificación otorgada a Banco Atlántico de Ahorro y Crédito, S.A.  (Banco Atlántico) incorpora un perfil de negocio, capacidad de generación, respaldo patrimonial, perfil de riesgo y fondeo y liquidez todos evaluados en moderado.

En 2023, Feller Rate subió la calificación de Banco Atlántico reconociendo un buen ritmo de crecimiento y una mejora de los ingresos y utilidad, observándose resultados positivos y crecientes a contar del cierre anual de 2020.

Banco Atlántico participa en la industria de bancos de ahorro y crédito desde 2005. La entidad es una de las instituciones de menor tamaño del sistema financiero, con una cartera de colocaciones netas en torno a $2.074 millones a mayo de 2024, que era equivalente al 3,9% del sistema comparable y solo a un 0,1% del sistema financiero. Su foco de negocios son los créditos de consumo, los que incorporan vehículos usados con garantía, junto con préstamos comerciales para pymes.

El banco ha venido siguiendo una estrategia de crecimiento, observándose avances importantes en el volumen de colocaciones. Esto, con el objetivo de fortalecer los resultados de última línea, los que bajo el período analizado recogen los efectos de una reducida escala y baja diversificación de operaciones, en una industria con partícipes de importante tamaño. En este contexto, en 2023 la entidad materializó las compras de las carteras de crédito de Banco Empire por $65.888 millones y Banco Múltiple Activos Dominicano por $790.893 millones. La administración espera poder fidelizar la nueva base de clientes junto con desarrollar más intensivamente el negocio de tarjetas de crédito. Dado el significativo incremento en la escala, la gestión comercial y operacional que pueda desarrollar el banco junto con el control y seguimiento de los riesgos cobran especial relevancia en el período actual.

La capacidad de generación de Banco Atlántico mejora paulatinamente en los últimos años. En efecto, ésta incorpora el avance de ingresos por intereses de la cartera de créditos y un aporte significativo de ingresos provenientes de actividades de inversión, complementados con otros ingresos que en el último período consideran ingresos por gestión de pólizas de seguros y por la operación de compra de cartera. Hacia adelante, el desafío de la entidad es avanzar en la generación de ingresos recurrentes asociados a la actividad de créditos, siguiendo el comportamiento de la industria, así como también sostener un nivel de gasto por provisiones y de apoyo coherente con los márgenes operacionales. 

En 2023, el margen financiero se benefició de la expansión de los créditos y de la ganancia por venta de inversiones, mientras los gastos por provisiones se observaron contenidos, lo que resulta relevante para apoyar los niveles de rentabilidad. Al cierre de 2023, la entidad registró una utilidad antes de impuestos de $83 millones, que se benefició de otros ingresos significativos ($52 millones). Así, la utilidad antes de impuestos sobre activos totales era 3,3%, incorporando además la mayor base de activos. Por su lado, a mayo de 2024, la entidad sostuvo un buen desempeño operacional con controlados gastos por provisiones y de apoyo, que se traducían en una utilidad antes de impuestos de $38 millones y un retorno sobre activos de 3,4% anualizado.

Los niveles de morosidad de las colocaciones se observan relativamente estables, apoyados además en el importante crecimiento del portafolio. Conforme a la mayor escala, es relevante que el banco sostenga un estrecho control del comportamiento de pago de los deudores, apoyado en sistemas y herramientas de control automatizadas y consistentes con el volumen actual de cartera. El índice de cartera vencida sobre colocaciones brutas era 1,1% a mayo de 2024, mientras la cobertura de provisiones para la cartera con problemas estaba en torno a 3,1 veces. La entidad mantenía un excedente de provisiones que la administración estima que permitirá absorber el gasto por provisiones del año asociado al comportamiento de pago de los deudores y crecimiento, restando presión al margen operacional.

Producto del crecimiento de la cartera de colocaciones y de los activos, los niveles de respaldo patrimonial se han observado muy presionados, posicionándose alejados de los ratios de otros actores de la industria. Por ello, la administración proyecta la capitalización de utilidades de años previos en el corto plazo consistente con lo informado en sus estados financieros auditados de diciembre de 2023. Por otro lado, el accionista controlador señaló su intención de incrementar la base de capital por medio de la incorporación de nuevos socios. A mayo de 2024, el patrimonio total alcanzó a $322 millones ($284 millones al término de 2023), reflejando un buen nivel de utilidades acumuladas. 

Los pasivos de Atlántico se concentran en depósitos a plazo y obligaciones con otras instituciones financieras, observándose al mismo tiempo concentraciones relevantes por acreedor. Por su condición de banco de ahorro y crédito, la entidad no puede efectuar captaciones en cuentas corrientes lo que, junto a la concentración de su fondeo, repercute en su costo de fondos. Al igual que otras instituciones financieras, se observa un descalce estructural entre los plazos de los activos y pasivos, dado por un fondeo concentrado en el corto plazo, especialmente en el tramo 0 – 30 días.  

El controlador de Banco Atlántico participa en otras entidades del sistema financiero de República Dominicana, siendo accionista de General de Seguros y de AFP Atlántico.

Perspectivas: estables

Las perspectivas de la clasificación de Banco Atlántico son “Estables”, reflejando especialmente su actual capacidad de generación de ingresos.

Feller Rate espera que la entidad pueda gestionar su actual portafolio de colocaciones con riesgos controlados y con estructuras y sistemas coherentes a su actual tamaño, de manera de seguir mejorando su desempeño financiero y operacional.